
En nuestro afán por proteger el medio ambiente y reducir nuestra huella ecológica, es crucial reconsiderar nuestra relación con los desechos. La “basura” que producimos diariamente puede ser vista como un valioso recurso, en lugar de simplemente deshacernos de ella. Aquí es donde entran en juego dos poderosos aliados: la compostera y la vermicompostera.